¿Qué es eso tan difícil que tanto te lo piensas?

Si algo quieres cambiar, toma acción y no te quedes en el puro deseo de que “algo suceda”

Las condiciones ideales, si lo piensas, existen solo en tu mente. Créalas, constrúyelas, búscalas, pero no esperes a que simplemente sucedan o “que se den”. Ese tiempo no llegará.

Toma estos consejos prácticos:

Negocios: ¿Quieres vender más? Averigua cuál es la necesidad de tu cliente, qué le gustaría solucionar, cómo mejorar su experiencia de compra. Crea un producto que cumpla con sus expectativas y preséntaselo. ¿No es lo que esperaba? Vuelve a preguntar. ¿Le encantó? Pregúntale cómo mejorarlo…

Relaciones: Si quieres avivar la pasión, empieza por ti. Averigua cuál es el lenguaje de amor de tu pareja. Actúa acorde. Si le gustan los chocolates, llévaselos a su oficina. Si tiene problemas con sus tareas, hazte cargo de un par de ellas. Encuentra qué la/le enciende en la cama… y esta misma noche, practícalo.

Comunicación: ¿Te llevas mal con algún compañero en la oficina? Hazle un favor. Encuentra su hobby preferido y habla con él/ella. Busca algo en común y pídele un consejo sobre ese tema. ¿Se siguen llevando mal? Invítale un café y háblalo con sinceridad.

Recuerda que:

Tú creas las situaciones y tú tienes el control sobre tus acciones.

Ponlo en práctica.

¿Esa idea? Ponla en marcha…

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Porque “hecho” es mejor que “perfecto”